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Deporte y desigualdad: caras de la misma moneda

  • Ionut Tutuman
  • 8 mar 2016
  • 3 Min. de lectura

Estamos a 8 de marzo. Día Internacional de la Mujer Trabajadora. Una jornada en la que se intenta poner sobre la mesa lo importante que es la igualdad entre hombres y mujeres en la sociedad. Una de las primeras manifestaciones de las mujeres tuvo lugar en 1857, momento en el que decidieron salir a las calles de Nueva York para protestar contra las pésimas condiciones laborales. Existe todavía un largo camino que recorrer, ya no sólo en lo que al empleo se refiere, sino en cuanto a los micromachismos, a la violencia de género, la brecha salarial, la libertad sexual, etc.


¿Pero qué es lo ha estado ocurriendo en el escenario del deporte?


Una pequeña pincelada histórica

La mujer ha tenido muchas dificultades para acceder al ámbito deportivo. El deporte se creó para el hombre con el objetivo de transmitir una serie de valores como la competencia o la fortaleza física. El panorama que permite justificar esta afirmación es el de los Juegos Olímpicos de la antigua Grecia. En el año 776 a.C., se organizaron las primeras competiciones y la presencia de la mujer era nula: no se le permitía siquiera asistir al espectáculo, puesto que los hombres concursaban sin ropa y verlos de esa manera se consideraba una infracción por parte de la mujer.


El primer paso hacia la integración de la mujer en el deporte fue la celebración de los Juegos Olímpicos de 1900. A pesar de que solamente se permitía competir en tenis, golf, vela y croquet, resultó ser un punto de inflexión notable. La inglesa Charlotte Cooper fue la primera campeona olímpica de la historia, tras vencer a la francesa Fourrier, a la estadounidense Jones y a la también francesa Prévost. En ese torneo de tenis tan sólo compitieron seis jugadoras y no fue hasta la siguiente celebración de los Juegos Olímpicos cuando se empezaron a entregar medallas.

Charlotte Cooper

Brecha salarial en el fútbol, el deporte más seguido

Las diferencias salariales entre hombres y mujeres también se ven reflejadas en el deporte y el fútbol es un ejemplo evidente de esta brecha. Si bien ambos géneros manejan grandes cantidades de dinero por practicar el deporte rey, la comparación es cuanto menos odiosa.


La revista Forbes elaboró una clasificación de los deportistas mejor pagados y en la posición nº3 aparece el futbolista Cristiano Ronaldo: alrededor de 72 millones de euros -sólamente superado por los boxeadores Floyd Mayweather y Manny Pacquiao, con 273 y 145 millones de euros, respectivamente. En cambio, la jugadora mejor pagada del mundo es Alex Morgan (del Portland Thorns de la National Women's Soccer de EEUU): unos 2,7 millones de euros. La segunda mejor pagada de mundo se encuentra a años luz de la estadounidense. La brasileña Marta Vieira cobra unos 283 mil euros al año, teniendo en cuenta también los ingresos por publicidad. A años luz también del segundo futbolista mejor pagado del mundo, Lionel Messi, quien se embolsa anualmente unos 67 millones de euros.

La jugadora estadounidense Alex Morgan

Declaraciones desafortunadas

BOLOS - "Un aplauso para las madres y mujeres que nos laváis y plancháis la ropa y os ocupáis de tenerlo todo a punto para que triunfemos en el deporte". Palabras del presentador de la entrega de premios de bolos (Trofeo Ebro).


TENIS - Toni Nadal, el tío y entrenador de Rafa Nadal, también dejó entrever un cierto machismo en relación al nombramiento de Gala León como capitana de la selección de la Copa Davis: "No es normal tener a una mujer al frente de la Davis porque no conoce el circuito masculino y además los equipos pasan mucho tiempo en los vestuarios con poca ropa y con una mujer no deja de ser extraño". En la misma línea fueron los comentarios del tenista Fernando Verdasco: "Siempre que se pueda, el capitán debe ser un hombre".


AUTOMOVILISMO - Sergio 'Checo' Pérez, piloto mexicano, dijo acerca de la escocesa Susie Wolff que estaría "mejor en la cocina" que de piloto, y "que te gane una mujer no sería bueno".


BALONCESTO - El jugador de baloncesto Matt Walsh, de los Virtus Bolonia, "no escucharía una palabra que me dijera una mujer entrenadora". Estas declaraciones inapropiadas, que muchos calificaron de machistas, las realizó después de la contratación de Becky Hammon como nueva entrenadora asistente de los San Antonio Spurs.


FÚTBOL - "Las mujeres no tienen sitio en el fútbol masculino". Kerem Demirbay, jugador del Fortuna de Dussledorf, de la segunda división alemana, lanzó unas duras palabras hacia la colegiada Bibiana Steinhaus, quien momentos antes había decidido expulsarse por doble amarilla.


 
 
 

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