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"Economia de butxaca": la economía que se entiende

  • Ionut Tutuman
  • 14 mar 2016
  • 5 Min. de lectura

La crisis económica, que se ha instalado en nuestro día a día desde hace unos años, está provocando un cierto revuelo social. Esta alarma social se engendra irremediablemente a raíz de la preocupación que perturba a la mayoría de personas como consecuencia de los efectos producidos por este bache económico por el que están obligados a pasar. Todavía no ha llegado el día en que podamos predecir el futuro para explicar qué es lo que sucederá, pero sí que es posible echar la vista hacia atrás y deternos en los desaciertos y las pésimas gestiones que antaño se llevaron a cabo para acabar de entender la situación en la que nos hallamos. Y, para aquellos que se echan las manos a la cabeza antes de tiempo fruto del temor a enfrentarse a un vocabulario que sólo está al alcance comprensivo de determinados expertos en materia económica, os obsequiaré con un alivio: no os preocupéis. “Economia de butxaca” es el libro ideal para disponer de una visión panorámica sobre la economía global y local sin necesidad de poseer un opulento bagaje conceptual.


El encargado de permitirnos entender, al fin, la economia es Josep-Maria Ureta i Buxeda (Sabadell, 1952). Licenciado en Periodismo por la Universidad de Navarra, trabajó entre 1974 y 1983 en los gabinetes de Presidencia de la Diputación y de la Generalitat. Especialista en el ámbito económico, Ureta también ha sido subdirector de La Gaceta de los Negocios y actualmente trabaja, desde 1991, en El Periódico de Catalunya y es colaborador en Catalunya Ràdio.

Quien ha seguido a lo largo de estos años las diversas publicaciones de este periodista económico, no se topará con nada nuevo. Él mismo advierte de su negativa inicial a elaborar un libro, puesto que “ya no tengo nada más que decir que lo que ya he escrito”. Sin embargo, finalmente accedió, y la Editorial Viena realizó una selección cuidadosa de sus mejores textos para que él terminara plasmándolos de una forma original en esta obra, cuyo propósito es, en palabras del mismísimo Ureta, “que se entienda”.


La ordenación de los diferentes contenidos en diez capítulos es una más que evidente declaración de intenciones ya anticipada. La sencilla forma de agrupar los textos justifica de nuevo su pretensión de hacer llegar la economía al ciudadano. Todo este compendio de artículos publicados en El Periódico de Catalunya entre los años 1990 y 2005 se vertebran sobre tres pilares fundamentales que Ureta irá desgranando en varios subtemas.


Por un lado, es muy manifiesta su preocupación insistente por las relaciones entre Catalunya y España: el periodista aporta su visión sobre la financiación catalana o el desigual crecimiento entre España y Catalunya. Por otro lado, a lo largo de las páginas se vislumbra cierto pavor en relación a la huella que podría generar la creciente globalización de la economía mundial. En este sentido, resulta imprescinsible poner el acento sobre su capacidad anticipadora en algunos aspectos. En el capítulo sobre la economía global, “Tots a 100”, Ureta señala: “En un abrir y cerrar de ojos hemos pasado de traer de China objetos cualificados de artesanía hecha a mano a importar sus productos industriales, aunque sean de tecnología sencilla. Es un aviso”. Un aviso que ponía sobre la mesa la posibilidad de cambios importantes en las relaciones económicas internacionales como resultado de la llegada de ventiladores de bolsillo chinos en el año 1994. Y esta no es, sin embargo, la única señal de su olfato de anticipación a los acontecimientos: la crisis del téxtil del 2002, cuyos efectos se comenzaron a notar a partir del año 2005.


El tercer eje vertebrador de “Economia de butxaca” tiene que ver con la ciudadanía en general. Es decir, siguiendo la tónica dominante de su exquisita pluma, con un tono diáfano y accesible, el periodista manipula -en el sentido más positivo de la palabra- determinados ingredientes del lenguaje económico. El crecimiento de los precios de la vivienda, el IPC, las relaciones con Hacienda o la política de pensiones son algunas de las aristas en las que Ureta se detiene a observar con el propósito de transmitirlos de la mejor manera posible y explicar de qué forma inciden en cada uno de nosotros.

Todos los contenidos proyectados en el libro “Economia de butxaca” se encuentran apoyados en un enorme fondo documental. No obstante, hay que hacer hincapié en lo más llamativo, desde mi humilde punto de vista, de este libro: los constantes paralelismos, las metáforas empleadas, las referencias mitológicas y las curiosas leyendas e historias a las que se hace alusión. Cada uno de los artículos están sellados con un título más propio del mundo literario, si bien no es de extrañar que, una vez más, Ureta haga alarde de su pretensión de invitar a una lectura amena y comprensible de unos temas que, a priori, pueden resultar demasiado latosos para las personas que no están muy familiarizadas con ciertos conceptos.


Precisamente estos títulos cargados de originalidad son sólo un adelanto: en gran parte de los artículos, el periodista económico inicia su exposición ayudándose de metáforas o leyendas, tal y como señalábamos al principio. Un ejemplo de este matiz que lo dota de personalidad es “Les idees d'Alícia”; este artículo empieza subrayando que “cuando Alicia tiene un momento de reflexión viajando por el país de las maravillas exclama abrumada: <<Tengo muchas ideas, pero todavía no las entiendo.>> Cuando nuestros banqueros, empresarios, políticos y académicos quieren describir el panorama actual de la nueva economía con unas palabras o con otras se están refugiando en los principios básicos que Lewis Carroll ya puso en boca de su protagonista”. Y a partir de aquí explica que “nada es a largo plazo” y “ante la duda, hay que comprar”, para terminar comparando con las ideas de negocio -alianzas, compras, intercambios- que tenían en mente el banco BBVA y Telefónica.


Otro de los ejemplos de esta brillante manera de acercar la economía a las personas es el artículo “Quan Zeus va desplaçar Cronos”. El sabadellense traslada la lucha entre Cronos y Zeus al escenario actual para presentar el pulso entre Microsoft (Cronos) y el Gobierno de Estados Unidos (Zeus). Asimismo, es de resaltar el interesante paralelismo (“Sancho Panza a la borsa”) entre un pasaje protagonizado por Sancho Panza en “El Quijote” y las mentiras en torno a las grandes multinacionales para favorecer sus intereses. Ureta critica con una sutil ironía a las empresas Panrico, Damm y Danone por “ocultar sus intenciones o manifestarlas tan de verdad que tampoco son creíbles”.


En definitiva, creo que “Economia de butxaca” es un libro muy recomendable para aquellos -y me incluyo- que quieren adentrarse en el complejo mundo de la economía, pero desconocen los caminos que han de tomar para conseguirlo. La llaneza, el ingenio y la desenvoltura que singularizan a Josep-Maria Ureta hacen que esta obra sea el sendero más apropiado para llegar a buen puerto.

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